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¿Qué pasa si no estoy en la póliza de seguro temporal?

Uno de los grandes problemas que pueden presentarse en la carretera es tener algún tipo de accidente de coche. Este problema se agrava cuando, a la hora de gestionar el siniestro, uno descubre no estar en la póliza de seguro temporal contratada. 

Quien asume el riesgo de circular sin seguro lo hace sabiendo que incumple la ley. Sin embargo, también puede darse el caso de conducir un coche, verse implicado en un siniestro y no estar correctamente incluido en el seguro. 

¿Cómo debe procederse en ese contexto? ¿Hay alguna manera de gestionarlo y minimizar consecuencias? Todas estas preguntas y más vamos a explorarlas a lo largo de este artículo.

 

 

Entendiendo el seguro temporal y sus limitaciones

Un seguro temporal es una póliza que se activa durante un periodo de tiempo generalmente breve y limitado.

Frente a la modalidad tradicional anual, en la que la póliza permanece activa durante 365 días, el seguro de automóvil temporal tiene un principio y un final mucho más determinados y limitados. Así, puede contratarse durante un solo día o durante un máximo de seis meses.

Es, por lo tanto, una solución aseguradora a medida y adecuada para circunstancias muy concretas, como un viaje, una urgencia o un periodo intermedio entre cambio de propietarios. 

Para comprender la seguridad no hay que enfrentarse a ella - seguro-temporal.es
Para comprender la seguridad no hay que enfrentarse a ella – seguro-temporal.es

 

 

¿Qué es el seguro temporal y quién debería estar cubierto?

Como cualquier otro tipo de seguro, el seguro temporal cubre a quienes se incluye en el contrato. La diferencia es que esta cobertura, además, está sujeta a un periodo de tiempo más breve de lo habitual.

Suele ser una alternativa elegida por conductores y propietarios de vehículo que necesitan una protección adicional y temporal, como su propio nombre indica. Así, contratan una póliza por días, semanas o meses que les proteja ante circunstancias acotadas en el tiempo. Un ejemplo sería un profesional de la compraventa que necesita un seguro durante el proceso de transporte, gestión y entrega al comprador.

En cuanto a quién debería estar cubierto, todo depende de qué se contrate. Generalmente, se establece un conductor habitual, con la opción de añadir conductores ocasionales, como puede ser un hijo que acaba de sacarse el carnet de conducir, el cónyuge que apenas conduce o incluso un amigo con el que, esporádicamente, se comparte el coche.

Por supuesto, para garantizar esa cobertura, la aseguradora temporal debe ser avisada y disponer de los datos correspondientes. Quien no está correctamente incluido en la póliza, queda fuera de ella, de modo que, en caso de conducir el coche cuando se produce un accidente, no gozará de ningún tipo de protección.

 

 

Consecuencias de no estar incluido en la póliza

Una pregunta habitual es qué pasa si tengo un accidente y no estoy en la póliza de seguro temporal. Como hemos adelantado, la respuesta es simple, aunque no agradable: de manera general, la póliza no cubrirá los daños propios.

Sí quedarían cubiertos los daños a terceros, ya que el coche contará con la cobertura obligatoria de responsabilidad civil. Eso sí, la aseguradora, según los gastos, podría abonar las indemnizaciones correspondientes, pero luego reclamárselos al conductor en cuestión.

La única excepción es que, además de no estar en el seguro, la persona condujese bajo los efectos del alcohol o las drogas. En ese caso, ningún gasto quedará cubierto y, además, deberá hacerse frente a las posibles consecuencias penales, pues se trata de un delito grave.

Hay otra excepción, esta positiva, pero que depende de las cláusulas de la póliza temporal contratada. Puede darse el caso de que una cláusula establezca que quedarían cubiertos todos los conductores que, aun sin estar dados de alta como conductores ocasiones, tuviesen más de 25 años y más de dos años de antigüedad con el carnet. Es decir, conductores que no son de riesgo.

En definitiva, si vas a conducir un coche que no es tuyo, y sobre todo si eres un conductor de riesgo (por tu edad y/o por tu experiencia al volante), lo recomendable es que formes parte de la póliza. Otra opción es contratar una póliza temporal adicional para cubrir el periodo en el que vas a coger el coche, aunque solo sea un día.

 

 

Implicaciones legales y financieras de un accidente de coche sin cobertura

Hemos introducido las consecuencias legales y financieras de tener un accidente y no estar en la póliza de seguro temporal, pero vamos a profundizar en ellas.

Es importante destacar que, más allá de lo económico, conducir sin seguro también puede convertirse en un delito.

Implicaciones legales y financieras de un accidente de coche sin cobertura - seguro-temporal.es
Implicaciones legales y financieras de un accidente de coche sin cobertura – seguro-temporal.es

 

 

 

Responsabilidades legales y posibles sanciones por no asegurar

Lo primero que debemos entender es que no es lo mismo conducir un coche que no está debidamente asegurado, que conducir un coche que sí tiene seguro, pero en el que un conductor no se está.

Como es lógico, el primer caso es el más grave y puede derivar en sanciones de hasta 3000 €, más el pago de los gastos derivados si el coche sin seguro ha provocado el accidente. A esto se le suman consecuencias legales como la inmovilización del coche o la retirada de puntos del carnet, y el tener que asumir otros gastos y responsabilidades derivadas, como un juicio penal en caso de accidentes graves.

En el segundo caso, que es el que nos ocupa, si se tiene un accidente y no se está en la póliza de seguro temporal, no hay una sanción institucional como tal, pero sí pueden repercutirse gastos.

 

 

Impacto financiero: costos de reparaciones y compensaciones

¿A cuánto puede ascender el coste de tener un accidente sin estar en la póliza de seguro temporal? El impacto y responsabilidad financiera dependerán de la gravedad del siniestro y de las reparaciones e indemnizaciones que se den.

Por lo tanto, se tienen en cuenta:

  • Gastos de reparación de daños propios

 

  • Gastos de defensa jurídica en caso de siniestros graves que acaben en juicio

 

  • Gastos de asistencia en carretera (por ejemplo, si la grúa tuvo que llevarse el coche)

La aseguradora, por regla general, no cubrirá los daños propios, como una reparación del coche, ya que estos solo quedarían cubiertos si la persona conductora estaba dentro del seguro. Incluso si, en un principio y para agilizar trámites, la aseguradora paga parte o la totalidad de la indemnización, podría ejercer su derecho de repetición y reclamar al titular del seguro, pues es el responsable último de haber dejado su coche a una persona que no estaba asegurada.

Otra opción, aunque menos común, es que la aseguradora sí cubra parte de los gastos. No obstante, para ello aplicará la denominada “regla de la equidad”. Esta se calcula según una fórmula: importe de los daños x prima neta pagada (es decir, lo contratado) / prima neta teórica del riesgo real (lo que debería haberse contratado, esto es, el precio de un conductor ocasional). Así, se establece la reducción proporcional de la indemnización y la aseguradora solo paga lo “justo”.

 

 

Manejando la situación: Pasos a seguir después de un accidente sin cobertura

Si, a pesar de todo, vas a tomar el riesgo de conducir un coche sin estar en la póliza de seguro temporal, debes saber cómo actuar en caso de accidente o siniestro. 

Manejando la situación, pasos a seguir despues de un accidente sin cobertura- seguro-temporal.es
Manejando la situación, pasos a seguir despues de un accidente sin cobertura- seguro-temporal.es

 

 

Comunicación con la aseguradora y partes afectadas

Como es lógico, la opción de añadirte a la póliza a posteriori no es factible, pero lo que sí puedes hacer es mantener una buena comunicación con la aseguradora para minimizar las consecuencias y agilizar los trámites. 

Estos consejos aplican no solo al conductor que no estaba en el contrato de seguro, sino también el tomador de dicho contrato y al propietario del automóvil, que son responsables indirectos del siniestro:

  • En el momento y lugar del siniestro, como es siempre recomendable, toma los datos de todas las personas y vehículos implicados para poder tramitar las reclamaciones. Si es posible, intentad dar un parte amistoso.

 

  • Llama a la aseguradora con la que está suscrita la póliza temporal para comunicar el siniestro y las circunstancias en las que se ha dado (sin estar tú en la póliza temporal).

 

  • Facilita toda la documentación que se solicite (posiblemente te pedirán que describas lo que ha ocurrido, además de información personal).

 

  • Una vez establecida la culpa del siniestro, si ha sido tuya, la aseguradora cubrirá los daños a terceros. 

 

  • Mantente al tanto de todas las novedades, aceptando la reclamación que pueda solicitar tu compañía de seguros.

 

 

Consideraciones legales: ¿Cuándo buscar asesoría legal?

En principio, si tienes un accidente leve sin estar en la póliza temporal, no debería haber demasiados problemas legales. Especialmente si se aceptan las consecuencias económicas y las reclamaciones, una vez tramitadas estas y asumido su coste, todo quedaría solucionado.

No obstante, puede haberse producido un accidente grave con víctimas mortales o heridos. Es entonces cuando el siniestro puede derivar en un juicio para determinar la responsabilidad en el accidente, solicitar indemnizaciones mayores o incluso establecer consecuencias penales. En ese caso, tanto el conductor que no estaba en la póliza como el tomador y/o propietario del vehículo deberían buscar asesoría legal.

En una situación “normal” en la que el seguro está en regla, esta asesoría la asumiría la compañía. Sin embargo, como hemos visto, al no estar el conductor debidamente incorporado en la póliza, la aseguradora no está obligada a ofrecer la protección legal.

 

 

Cómo prevenir problemas futuros con el seguro temporal

Nunca se debe conducir sin seguro. Incluso cuando se hace de manera inconsciente, porque se creía que la póliza cubría a todos los conductores, las consecuencias son las mismas. Es decir, el desconocimiento de la ley no exime de la responsabilidad de cumplirla.

Para evitar esa inconsciencia, es importante hacer una buena prevención de riesgos, y eso pasa por conocer bien nuestras opciones y decisiones aseguradoras.

Cómo prevenir problemas futuros con el seguro temporal - seguro-temporal.es
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Importancia de verificar y actualizar regularmente la póliza

Existen situaciones en las que se contratan y encadenan varias pólizas temporales, lo que puede hacer perder el control sobre ellas.

Por ejemplo, los profesionales de la compraventa de coches, los talleres que ofrecen coches de sustitución, o las empresas de alquiler gestionan una flota de automóviles relativamente grande. Además, al ser automóviles que cambian de propietario o de conductor ocasional con cierta frecuencia y en periodos breves, optan por contratar seguros temporales.

No existe un problema con ello, a no ser que, como adelantábamos, no se controle bien qué pólizas están activas y bajo qué condiciones. Así pues, es fundamental llevar un control exhaustivo de los contratos y de sus coberturas, verificando el tiempo de activación y qué conductores están cubiertos.

De este modo, se evitará dejar que alguien que no está debidamente cubierto coja el coche y tenga un accidente estando sin seguro.

Esta verificación también puede convertirse en una actualización de la póliza. Si se prevé que alguien que, en un primer momento, no está en póliza debería estarlo porque va a hacer uso del vehículo, hay que contactar con la compañía para hacer las modificaciones necesarias (incluyéndolo como conductor ocasional) o contratar una póliza temporal nueva y adicional.

 

 

Consejos para elegir y gestionar adecuadamente el seguro temporal

Antes de acabar, y manteniendo nuestro objetivo de ayudarte en la gestión de seguros temporales, compartimos algunos consejos para evitar riesgos y conducir siempre correctamente cubierto y protegido:

  • Elige el seguro adecuado a tus circunstancias: las pólizas temporales se adaptan a lo que necesitas a nivel de cobertura de seguro y de tiempo. Escoge la opción más adecuada según ello, pagando solo por lo que necesitas y garantizando una protección a medida.

 

  • Ten siempre disponible la documentación necesaria: tanto del coche como de su propietario y conductores. Esto agilizará cualquier trámite.

 

  • Lleva un control temporal: especialmente si contratas seguros temporales con frecuencia, actualiza la información para evitar huecos en la cobertura o pensar que estás asegurado cuando no es así.

 

  • Lee bien las cláusulas: nunca des por hecho nada del contrato. Comprueba bien qué y quién está cubierto. Que una cláusula sea común no significa que sí o sí esté incluida en tu póliza.

 

 

Cómo evitar el riesgo de no estar en la póliza de seguro temporal

Gestionar un contratao de seguro de manera adecuada es fundamental para evitar problemas como no estar en la póliza de seguro temporal.

Los problemas van desde dificultades para obtener una compensación por accidentes hasta tener que hacerse cargo de elevados costos de reparaciones y sanciones legales.

En este sentido, la educación sobre seguros es clave para que los conductores comprendan las limitaciones de las pólizas temporales y también los derechos del asegurado. Solo así podrán tomar decisiones conscientes e informadas.

Finalmente, el consejo más importante es mantener a todos los posibles conductores dentro del seguro y de la legalidad. Solo con una gestión responsable y un control riguroso se garantiza una conducción más segura para todo el mundo.

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